El 30 de abril tuvo lugar en la Fundación Euroárabe el seminario “Espiritualidad, juventud y género en el siglo XXI” cuyo objetivo principal fue facilitar un espacio para mujeres y jóvenes creyentes de distintas confesiones que compartieron desde su experiencia cómo viven su espiritualidad en la actualidad. En el seminario participaron miembros de confesiones religiosas musulmana, católica, protestante y budista, y fue moderado por Soukaina Belkat y José Luis Salido Medina, investigadoras de la Fundación Euroárabe.
La actividad, organizada por la Euroárabe en el marco del proyecto europeo PARTES, abordó una serie de preguntas guía en las claves de género y dinámicas sociales actuales. Se dividió en dos partes, una dedicada al papel de la mujer en las diferentes religiones representadas y otra sobre la experiencia de la juventud con su fe.


El papel de la mujer en la religión
En la mesa “El papel de la mujer en la religión” participaron Lola Parras Chica, budista tibetana que fuera directora del Centro Budista Nagarjuna de Granada; Khatarina Zimmerhofer, católica y estudiante de Teología; Zoraida Ali Morell, musulmana, filósofa y psicóloga; y Eva Domínguez Sosa, pastora de la iglesia Protestante de San Pablo.



Lola abordó la situación de la mujer en el budismo, señalando la persistencia de patrones patriarcales en las religiones. Estos patrones se manifiestan en la asignación de roles de género, como la maternidad, cuyo desarrollo se ve influenciado por el contexto sociocultural. Por ello, Lola argumentó que no se deben aceptar acríticamente todos los preceptos religiosos. Enfatizó la importancia de no naturalizar roles maternos que privan a las mujeres de tiempo para actividades como la meditación. Abogó por una postura de tolerancia cero hacia el patriarcado, pero desprovista de odio. Finalmente, destacó que el autoconocimiento y la comprensión profunda conducen a la iluminación en tres ámbitos fundamentales: la ética, la conducta, la concentración-meditación y la sabiduría.
Khatarina resaltó que el bautismo confiere una dignidad fundamental e igualitaria desde el nacimiento. A continuación, profundizó en el principio ignaciano de «ver a Cristo en el prójimo», explicando cómo esta perspectiva invita a reconocer la inherente valía de cada individuo, trascendiendo distinciones sociales o de género. En su análisis sobre las mujeres en la Biblia, destacó la figura central de la Virgen María, cuyo papel es crucial en la narrativa cristiana. Además, se refirió a las «tres Teresas»: Santa Teresa de Ávila, figura cumbre del misticismo y reformadora del Carmelo; la Venerable Sierva de Dios Teresa de Jesús Jornet e Ibars, fundadora de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados; y Santa Teresa de Calcuta, cuyo incansable servicio a los más necesitados la convirtió en un icono de la caridad.
Eva abordó los feminismos críticos y la perspectiva de la interseccionalidad, señalando que vivimos en una realidad social profundamente marcada por el patriarcado y con una significativa herencia judeocristiana. En relación con el papel de la religión en la configuración de roles de género, mencionó cómo históricamente algunas religiones instruían a las mujeres en los aspectos esenciales para llevar a cabo sus ritos de purificación, como en el caso de las prácticas musulmanas. En contraste, destacó un momento significativo en la tradición cristiana donde Jesucristo otorgó un papel crucial a María Magdalena al convertirla en la primera testigo de su resurrección, enviándola a anunciar esta buena nueva a los demás discípulos. Este acto desafió las normas sociales de la época y elevó el testimonio de una mujer a una posición fundacional dentro del cristianismo.
Juventud y religión. Experiencias desde la actualidad
Por su parte, la segunda mesa “Juventud y religión. Experiencias desde la actualidad” contó con las ponencias deIsairis Valerio Domínguez, católica y estudiante de Teología, y Brahim Iguizol, musulmán, sociólogo especializado en Antropología y tendencias del pensamiento islámico.

Isairis inició su intervención en la mesa sobre espiritualidad y jóvenes enfatizando la importancia de la coherencia entre los valores personales y la autenticidad. Propuso que el examen diario de conciencia espiritual, en conjunto con las vivencias, deberían cultivarse en un espacio de recogimiento. Subrayó que una sociedad plural ofrece el valioso beneficio del cuestionamiento argumentado. En este sentido, abogó por «resucitar» aquellos elementos que favorecen la libertad espiritual individual. Isairis contrastó la polarización con la necesidad de un diálogo interno profundo, señalando la importancia de no ceder ante el odio ni los discursos que lo promueven, sino de abrazar una libertad que nos abra a la conexión con los demás. Finalmente, afirmó que la intolerancia tiene su raíz en el miedo, pero que la sociedad debe adoptar una postura crítica y reflexiva para superarlo.
Brahim sugirió que volver a un espacio de recogimiento podría generar una multiplicidad de interpretaciones, fomentando así una modernización secular del entendimiento espiritual. Propuso la necesidad de una espiritualidad contemporánea que trascienda las instituciones religiosas tradicionales, permitiendo a los individuos experimentar lo sagrado de manera directa y personal. También destacó cómo el Islam puede ser una herramienta para combatir el egoísmo arrogante, la explotación y el abuso de poder, promoviendo una participación activa en la construcción de una sociedad más justa. En su conclusión, Brahim enfatizó la necesidad imperante del diálogo, fundamentado en la humildad de aprender de los demás, para trabajar conjuntamente en la resolución de los desafíos globales. Este diálogo requiere un marco de igualdad, desprovisto de relaciones de poder e intolerancia. Lamentó la insuficiencia del diálogo transreligioso actual, abogando por un mayor aprendizaje y cooperación interconfesional como vía para mitigar la creciente polarización social.
PARTES pondrá punto final el próximo junio
En respuesta a la creciente ola de ataques y delitos de odio dirigidos contra lugares de culto en Europa y a nivel global desde 2023, el proyecto PARTES ha emergido como una iniciativa crucial. Mezquitas, sinagogas e iglesias se han convertido en objetivos vulnerables, una situación que se ha visto exacerbada por el auge de los delitos de odio en línea y los ciberataques, que en ocasiones se entrelazan con campañas físicas. Estos actos de violencia son un reflejo de un problema extremista más profundo, alimentado por discursos tóxicos, la falta de comprensión intercultural e interreligiosa, y una participación social insuficiente en la prevención del extremismo.
El seminario «Espiritualidad, juventud y género en el siglo XXI» representó la culminación de las actividades del proyecto, precediendo al evento de clausura que se celebrará en Viena el próximo 16 de junio.
Un logro fundamental de PARTES ha sido el desarrollo del «PARTES Guardian Approach», un modelo integral de prevención diseñado para fortalecer la seguridad de los lugares de culto en toda Europa y, de este modo, mitigar los delitos de odio que afectan a las comunidades religiosas. El proyecto se ha centrado en pilares clave como el fortalecimiento de la cooperación entre las autoridades públicas y las comunidades religiosas, la implementación de campañas de sensibilización, la organización de formaciones y seminarios especializados, y la exhaustiva evaluación e intercambio de las mejores prácticas y herramientas disponibles en este campo. Un resultado tangible de este esfuerzo son las «Hojas de Acción» elaboradas por el consorcio de PARTES, una valiosa recopilación de prácticas efectivas implementadas en la Unión Europea para optimizar la protección de los lugares de culto.